¿Y si la historia de Bitcoin empezó mucho antes de 2009? ¿Y si alguien ya había imaginado su símbolo y su creador casi dos décadas antes? Parece imposible… pero hay un detalle escondido en un videojuego de 1991 que hoy tiene intrigada a toda la comunidad cripto.
Lo que estás a punto de leer no prueba nada, pero sí abre un mundo de misterio que vale la pena explorar.
El hallazgo que lo inició todo: un símbolo familiar en un juego retro
En 1991 salió Space Quest IV: Roger Wilco and the Time Rippers, un clásico de Sierra On-Line. Para la mayoría, es un juego más de aventuras espaciales de los 90. Pero para los curiosos del mundo cripto, guarda una sorpresa inquietante.
Dentro del juego aparece una moneda ficticia llamada Buckazoid, usada como dinero galáctico. Hasta ahí, todo normal.
Lo sorprendente es su símbolo: una B con dos barras verticales, prácticamente igual al logo de Bitcoin que todos conocemos hoy.
No es parecido.
No recuerda.
Es casi idéntico.
Y sí, hablamos de un detalle que apareció 18 años antes del whitepaper de Bitcoin.
El símbolo: ¿casualidad gráfica o guiño oculto?
Diseñadores y fans llevan años recordando que en los 90 era común jugar con símbolos inspirados en monedas reales, como el dólar ($) o el yen (¥). Pero el Buckazoid no toma esos modelos. Va más allá: crea una B atravesada por dos líneas, exactamente como Bitcoin (₿).
¿O alguien tuvo una intuición visual sobre cómo serían las monedas digitales del futuro?
No hay pruebas para afirmarlo… pero hay más coincidencias que alimentan el fuego.
Los nombres que encendieron la teoría: Rod Nakamoto y Satoshi Uesaka
Entre los desarrolladores del juego encontramos dos nombres que hoy suenan demasiado familiares:
Rod Nakamoto, diseñador y productor en Sierra.
Satoshi Uesaka, parte del equipo de programación.
Ponlos juntos:
Rod + Satoshi → Satoshi Nakamoto
Obviamente, nadie afirma que estas personas sean los creadores reales de Bitcoin. Nada indica eso. Pero la coincidencia es tan extraña que muchos en foros como Reddit y X la han usado como combustible para todo tipo de teorías.
Algunos creen que es una casualidad divertida.
Otros piensan que podría tratarse de un guiño interno que quedó perdido en el tiempo.
Y los más conspirativos sugieren que el nombre “Satoshi Nakamoto” pudo haberse inspirado—consciente o inconscientemente—en estos dos desarrolladores.
¿Es posible? Claro que sí.
¿Es probable? Difícil de probar.
Por qué esta teoría ha fascinado a la comunidad cripto
Bitcoin no solo es una moneda: es una historia de misterio. Su creador sigue siendo anónimo, su origen está rodeado de silencios y casi todo lo que lo rodea parece diseñado para generar preguntas.
Así que cuando aparece un hallazgo tan extraño como este, internet se vuelve loco:
Un símbolo casi idéntico.
Dos nombres que forman “Satoshi Nakamoto”.
Un videojuego lanzado 18 años antes del nacimiento oficial de BTC.
Para los fans del misterio, esto es dinamita.
Además, se mezcla con un factor extra: la nostalgia por la informática de los 90, una época de hackers, experimentación y primeras ideas sobre mundos digitales.
¿Podría alguien haber predicho Bitcoin en los 90?
Aunque no haya evidencia de que Bitcoin existiera en la mente de alguien en 1991, la idea de una moneda digital descentralizada ya circulaba en entornos académicos desde los 80.
Criptógrafos como David Chaum, por ejemplo, estaban desarrollando conceptos como eCash, y varios papers hablaban de dinero digital anónimo.
¿Pudo algún desarrollador del juego estar conectado con ese mundo?
Probablemente no.
Pero sí podían estar empapados del ambiente futurista y tecnológico de la época.
Space Quest siempre jugó con ideas de ciencia ficción: viajes temporales, tecnologías imposibles, mundos avanzados. Así que crear un símbolo de moneda “del futuro” no era descabellado.
Tal vez fue pura inspiración estética.
Tal vez fue una coincidencia afortunada.
O tal vez alguien tuvo una visión—accidental o no—del símbolo que más tarde adoptaría la criptomoneda más famosa del mundo.
Entonces… ¿premonición o casualidad?
La teoría no cambia la historia real de Bitcoin, pero sí añade una capa divertida de misterio.
Tres escenarios posibles:
1. Coincidencia total
Lo más lógico. Miles de símbolos se parecen sin querer, y los nombres japoneses también pueden coincidir.
2. Inspiración inconsciente
Quizás alguien que jugó Space Quest IV en los 90 terminó años después involucrado en Bitcoin y usó ese símbolo como referencia. Es posible, aunque nadie lo ha confirmado.
3. Guiño intencional que nadie descubrió hasta hoy
La opción favorita de los conspirativos: que algún creativo de Sierra haya querido dejar su marca o jugar con un concepto que nadie entendería hasta décadas después.
La realidad es que nunca lo sabremos.
Pero si algo demuestra esta historia, es que la cultura popular deja pistas inesperadas que con el tiempo parecen proféticas.
Conclusión: un misterio más en la historia de Bitcoin
El caso del Buckazoid y los nombres “Nakamoto” y “Satoshi” no prueba nada sobre el origen de Bitcoin, pero sí nos recuerda por qué este mundo es tan fascinante. Incluso un videojuego olvidado de 1991 puede esconder una conexión inesperada con la revolución financiera más grande de nuestro siglo.
¿Premonición?
¿Coincidencia?
¿O el universo jugando con nosotros?
Sea cual sea la respuesta, esta teoría ya se ganó su lugar en las curiosidades cripto más irresistibles de Internet.













